Unión del Barrio condena todos los actos violentos perpetrados contra los refugiados centroamericanos, ya sea que tengan lugar en la frontera de EE. UU./México o en la frontera sur de México. La violencia trumpista fascista de las milicias de derecha en Nuevo México es el primo del norte de la violencia neocolonial atrasada y auto-odiosa de los funcionarios de inmigración mexicanos en Chiapas, y ambos deben ser repudiados por igual.
Unión de Barrio declara solidaridad con nuestras hermanas y hermanos que sufren las consecuencias del brutal saqueo económico y la violencia normalizada, que a menudo no tienen más remedio que huir de sus hogares. Entendemos que las personas que migran al norte son refugiados, víctimas de una agresión imperialista desenfrenada, y que estas personas buscan recuperar la riqueza económica y la estabilidad política que el imperialismo de los Estados Unidos les ha negado violentamente durante cientos de años. Buscan una alternativa a las horrendas condiciones de pobreza y violencia normalizada que han sido generadas por las intervenciones económicas y militares dirigidas por los Estados Unidos tanto en México como en América Central.
El hambre, la desesperación y la violencia son síntomas de las políticas neoliberales impuestas por el intervencionismo de los EE. UU. e implementadas por lacayos dentro de México que a menudo reclaman ser “nacionalistas” para desviar la atención de su corrupción descarada, sin distinción de partido político.
En Unión del Barrio somos internacionalistas, latinoamericanistas y solidarios con mexicanas y mexicanos. Nuestro legado de lucha y solidaridad nos obliga a tomar partido por nuestros países hermanos en contra de la violencia xenófoba y los impulsos reaccionarios. Por lo tanto, rechazamos todas las fronteras coloniales que sólo sirven para dividir las luchas de nuestros pueblos. También rechazamos las distinciones artificiales, basadas en ideas y valores estrechos, nacionalistas y reaccionarios que solo empoderan a las élites dominantes en México, América Central y en toda América. ¡La caridad y el asilo son soluciones temporales y de parche curita para los estados neocoloniales fallidos de Nuestra América!
¡La única solución a la crisis de los refugiados es hacer revolución!
Unión del Barrio condemns all violent acts perpetrated against Central American refugees whether they take place along the U.S./Mexico border or along the Southern border of Mexico. The fascistic trumpista violence of right-wing militias in New Mexico is the northern first cousin of the backward, self-loathing neocolonial violence of Mexican immigration officials in Chiapas, and both must be equally repudiated.
Unión de Barrio declares solidarity with our sisters and brothers who suffer the consequences of the brutal economic plunder and normalized violence, they often have no choice but to flee from their homes. We understand that the people who are coming north are refugees, victims of unbridled imperialist aggression, and that these people are seeking to recover the economic wealth and political stability that U.S. imperialism has so violently denied from them for hundreds of years. They seek an alternative to the horrendous conditions of poverty and normalized violence that have been generated by economic and military interventions directed by the United States both in Mexico and in Central America.
Hunger, despair and violence are symptoms of neoliberal policies imposed by the U.S. interventionism, and implemented by lackeys within Mexico who too often claim to be “nationalists” in order to redirect attention away from their shameless corruption – without distinction as a political party.
Within Unión del Barrio we are internationalists, Latin-Americanists, and mexicanas/os solidarias/os. Our legacy of struggle and solidarity compels us to take the side of our sister countries against xenophobic violence and reactionary impulses. We therefore reject all colonial borders that only serve to divide our peoples struggles. We also reject artificial distinctions, based on reactionary narrow nationalist ideas and values that only empower the dominant elites in Mexico, Central America, and throughout Nuestra América. Charity and asylum are temporary band-aid solutions to the neocolonial failed states of Nuestra America!
The only solution to the refugee crisis is revolution!